jueves, 17 de diciembre de 2015

Rahab de Josué 2:1 y Rahab de Mateo 1:5

¿Rahab de Josué 2:1 es la misma Rahab de Mateo 1:5? Algunos concluyen que son dos personas distintas. Las razones son: (1) la grafía de Rahab Ῥαάβ en la LXX, Hebreos 11:31 y Santiago 2:5 es diferente a Rahab Ῥαχάβ de Mt. 1:5. (2) La ausencia del epíteto "la ramera" en Mateo 1:5 que sí aparece en Josué 2:1; 6:17,25; Hebreos 11:31; Santiago 2:25. (3) La improbabilidad cronológica puesto que si Rahab la ramera hubiera sido la madre de Booz, tendría más de 200 años. 
Con respecto a (1) Mateo no sigue estrictamente la grafía de LXX: Βόες (Mt. 1:5 NA27) vs Βοος (LXX Rut 2:1, etc.); Ἀβιά (Mt. 1:7 NA27) vs. Αβιου (LXX 1R. 15:8) o Αβια (LXX 1Cr. 3:10); Ἀσάφ (Mt. 1:7 NA27) vs. Ασα (LXX 1R. 15:8). Por otro lado, entre las variantes textuales de Josefo el nombre de Rahab aparece en unos manuscritos como Ῥαάβη y en otros como Ῥαχάβη (ver aquí pp. 293-294: https://archive.org/details/operajosephus01joseuoft). La diferente forma probablemente se deba a la transliteración Χ for ח (rāḥāb = Ῥαχάβ). 
En cuanto a (2), Mateo no usa aposiciones en la genealogía, el argumento apela al silencio, y presupone que la aposición es necesaria para la identificación de Ῥαχάβ. Es probable que la aposición ἡ πόρνη (en He. 11:31 y Stg. 2:25) aparezca porque se está citando a Jos. 6:17,23,25. La frase “de la que fue mujer de Urías” (Mt. 1:6) no es una aposición es una frase preposicional. Creo que la identificación de Ῥαχάβ = la ramera de Jericó es una hipótesis probable. 
Finalmente (3) depende de asumir que el aoristo ἐγέννησεν "engendró" indica procreación directa. Pero, vemos que Mateo 1:8 dice en griego Ἰωρὰμ δὲ ἐγέννησεν τὸν Ὀζίαν "Joram engendró a Uzías" cuando es evidente que Mateo no menciona a tres reyes entre Joram y Uzías: Ocozías, Joás, Amasías. Es probable que haya sucedido lo mismo entre Salmón y Booz
Volviendo a la pregunta ¿Rahab de Josué 2:1 es la misma Rahab de Mateo 1:5? Es probable que sí. Hay razones que nos permiten identificar a Rahab de Josué 2:1 con la de Mateo 1:5.