No cabe duda que uno de los versículos que constituye una crux interpretum es
Jeremías 31:22.La frase que es objeto de considerable debate e interpretaciones es: נְקֵבָה תְּסוֹבֵב גָּבֶר nĕqēbâ tĕsôbēb gāber. La lectura
masorética es apoyada por la lectura (parcial, por cierto) de 4QJerc. El versículo podría colocarse en dos líneas
paralelas:
עַד־מָתַי
תִּתְחַמָּקִין הַבַּת הַשּׁוֹבֵבָה
כִּי־בָרָא
יהוה חֲדָשָׁה
בָּאָרֶץ נְקֵבָה תְּסוֹבֵב גָּבֶר
ʿad-mātay titḥammāqîn habbat
haššôbēbâ
kî-bārāʾ YHWH ḥădāšâ bāʾāreṣ nĕqēbâ tĕsôbēb gāber
(Jer 31:22)
¿Hasta cuándo andarás
errante, oh hija contumaz?
Porque Jehová creará
una cosa nueva sobre la tierra: la mujer rodeará al varón.
Charles L. Feinberg[1],
nos ofrece un panorama de las diferentes interpretaciones:
1.
Cipriano[2],
Agustín[3]
y Jerónimo[4]
entendieron este texto como una referencia a la encarnación del Verbo de Dios
por medio de la virgen María.[5]
Según Feinberg, este punto de vista es inválido porque (1) la palabra “mujer” (neqēḇāh) es an-articulada (cf. Isa 7:14); (2) esta
palabra no puede significar “virgen” (es una palabra más general para mujer
distinguiéndola del varón); (3) el verbo “rodear” (sāḇaḇ) pone a un lado la idea de concebir; (4) no encaja en el contexto. La referencia a “virgen” en vv. 4 y 21 son personificaciones de Israel,
no de individuos.
2.
La mujer (como individuo, o como el pueblo de Israel) protege al varón (individuo
o YHWH).[6]
3.
La mujer es la “virgen Israel” que regresa al varón (YHWH).[7]
4.
La mujer (israelitas) protegiendo a la nación en caso de ataque indica
la seguridad que gozará Israel.[8]
5.
La mujer (Israel) que antes fue abrazada por YHWH, en los tiempos
postreros la mujer abrazará a su amante, YHWH.[9]
6.
La mujer (Israel) propondrá matrimonio al varón, YHWH.[10]
7.
La mujer es Israel que vencerá a los gentiles.[11]
8.
La mujer débil, Israel, será más fuerte que los babilonios.[12]
9.
La mujer toma la iniciativa en la guerra y en el sexo, es Israel que
tomará el liderazgo.[13]
Hay elementos comunes
en estas interpretaciones. Por el contexto, lo más probable es que la mujer sea
una personificación de Israel. Pero, eso no excluye a las mujeres en tanto
individuos. Por otro lado, la relación entre la mujer y el hombre es novedosa (una
nueva creación) con relación al ordo establecido.
En la ceremonia judía de
bodas se cita este texto como base para el acto cuando la novia camina
alrededor del novio dando siete vueltas. Tal práctica no debe estar muy lejos de lo
enseñado aquí en Jeremías.
Si bien este texto tiene varias propuestas de
interpretación, eso no significa que se deba admitir la “interpretación” de
aquellos que hablan de una “diosa madre”. Se pretende dar un significado al
texto sacándolo de su contexto. Es inadmisible.
[1] Cf. Charles L. Feinberg, "Jeremiah",
in The Expositor's Bible Commentary, Volume 6: Isaiah, Jeremiah,
Lamentations, Ezekiel ( ed. Frank E. Gaebelein;Grand Rapids, MI: Zondervan
Publishing House, 1986), 571.
[2] Sermo Nat. Domini
[3] Sermo IX de Tempore
[4] Simulque et
hoc notandum, quod nativitas Salvatori, atque conceptus dei, creatio nuncupetur
(Migne, PL t. 24,
col. 880). Disponible en
PDF aquí.
[5] Cf. Albert Condamin, “Le Texte de Jérémie XXXI, 22: Est-Il Messianique?”, RB
6 (1897) 396–404. Disponible en PDF aquí.
[6] Cf. R. K. Harrison, Jeremiah and Lamentations:
An Introduction and Commentary (TOTC 21; Nottingham, England: Inter-Varsity,
1973), 139. Cf. Jack R. Lundbom, Jeremiah 21-36: A New Translation
With Introduction and Commentary (New Haven; London: Yale University Press,
1974), 451; William McKane, A Critical and Exegetical Commentary on Jeremiah
(Edinburgh: T&T Clark, 1986), 807; F. B. Huey, Jeremiah, Lamentations
(NAC 16; Nashville: Broadman & Holman, 1993), 277; Barclay Moon Newman y
Philip C. Stine, A Handbook on Jeremiah (New York: United Bible
Societies, 2003), 644.
[7] Cf. James P. Hyatt, Jeremiah,
Prophet of Courage and Hope (New York: Abingdon, 1958); Gerald L. Keown et al., Jeremiah
26-52 (WBC 27; Dallas: Word, 2002), 123.
[8] Cf. Arthur E. Cundall, Jeremiah
(Grand Rapids: Eerdmans, 1969).
[9] Cf. Irving L. Jensen, Jermiah and Lamentations
(Chicago: Moody, 1974), 88.
[10] Cf. H. Freedman, Jeremiah (London: Soncino, 1961).
[11] Cf. H. A. Ironside, Notes on
the Prophecy and Lamentations of Jeremiah [New York: Loizeaux Brothers,
1946.
[12] Cf. Juan
Calvino, Commentaries on the Book of the Prophet Jeremiah (5 vols.; Grand
Rapids: Eerdmans, 1950), 4.115.
[13] Cf. J. A. Thompson, The Book of Jeremiah
(NICOT; Grand Rapids: Eerdmans, 1980), 576; William Lee Holladay, Jeremiah 2
: A Commentary on the Book of the Prophet Jeremiah, Chapters 26-52 (Hermeneia;
Minneapolis: Fortress Press, 1989), 195.